La Heredera CAPÍTULO 46: Black
Vaadhoo, Islas Maldivas, Mayo de 2015
Sus sandalias se enterraban en la arena, le gustaba la sensación que ésta le daba había tenido días tan tensos y a pesar de estar en un lugar tan paradisiaco, no había tenido tiempo de disfrutarlo todo había sido trabajo, perdiéndose de playas espectaculares, paisajes hermosos, definitivamente ese resort quedaría en un paraíso.
Horas antes de llegar a la playa habían hecho un recorrido por el sendero turístico y pudo haber disfrutado un poco el paisaje y su trabajo no sería tan extenuante, si no fuese por una persona: Bashar Hasbún, ese tipo no la dejaba ni a sol ni sombra, le caía peor que una patada en el trasero.
Bashar no dejó de hablarle durante el recorrido, pretendía ser cortés con ella y ayudarle en el descenso todo el tiempo con una gran sonrisa, para todos era un hombre carismático que encantaba a todo el mundo, los socios estaban felices con él, podía sostener conversación sobre casi cualquier tema, era un filántropo consumado y era el mejor en el tema del diseño, teniendo en su haberes edificios realmente influyentes en el mundo.
Su voz la fastidiaba, su forma de pegarse a ella y esas sonrisas salidas de catálogo, pero si era honesta eso le sucedía con la mayoría de las personas excesivamente formales, le parecía falso, lo único bueno de su conversación fue cuando le habló de una playa en donde se podía apreciar en su perfección el plancton y por eso estaba ahí estaba ansiosa de ver el espectáculo.
Había contado los minutos desde que se despidió de los trabajadores temprano, hizo tiempo, se duchó, comió incluso fue a la azotea por largo rato, se distrajo mientras llegaba la hora, ante la expectativa de ver ese espectáculo.
Por un momento pensó en William, la última vez que se vieron hicieron esa fantasía de vampiros que él había sugerido, había sido una noche excitante, aunque ella en lo personal más que disfrazarse prefería el sexo violento, le gustaba como la trataba con rudeza, desde que tuvieron sexo anal por primera vez no había vuelto atarla y comenzaba a extrañarlo.
De repente se detuvo y se giró a los guardas, en cierto punto del camino:
-Quiero ir sola - Marie les habló seria.
-Tenemos órdenes de... -Marie movió su cabeza
-De verdad quiero ir sola ustedes pueden hacer lo que quieran mientras tanto -Los hombres asintieron un tanto incómodos y ella se giró y continuó caminando.
La brisa desordenaba su cabello, le gustaba esa sensación pegajosa en su piel que la humedad del trópico traía consigo. Se sacó sus zapatos y enterró sus pies en la arena, aquello la extasiaba demasiado, sentir la fricción de los gránulos en sus dedos y como sus pies se hundían a medida que caminaba, definitivamente sus lugares favoritos eran las playas, podría vivir ahí eternamente.
Sus tímidos pasos se convirtieron en zancadas, tiró las sandalias a un lado y abrió sus ojos sonriendo al ver la playa azul, caminó hasta la orilla sintiendo sus pies mojados y como el plancton estaba alrededor de éstos, creando un efecto de luz, Marie se agachó y metió levemente sus dedos en el agua,
-Errantes -Dijo para sí.
El plancton, estaba merced del oleaje, era un nómada sin asiento fijo, mientras que el necton, era un nadador activo así que se podía desplazar a donde quisiera, a veces se sentía como el plancton dejando que las circunstancias dispusieran de ella, aquello la hizo sentir mal, podía irse, eso siempre se decía, pero por algún motivo no lo hacía.
Miró a los lados y de repente se sintió osada, desató las tiras del vestido y se lo quitó, fue hasta un lugar seco en la playa y lo puso al lado de sus zapatos, se partió el cabello en dos y cubrió sus pechos, no había nadie alrededor, sin embargo prefería hacerlo, odiaba pensar que sus guardias estuvieran a un costado sin poder seguir sus órdenes y desde esa noche con Gerard realmente la incomodaba mucho que la vieran desnuda.
Caminó hacia la playa y comenzó a entrar poco a poco en el mar, el agua llegaba hasta su torso y estaba un poco fría, le encantaba como la luminiscencia bordeaba su cintura, se recostó en el agua y extendió sus brazos, viendo como ahora sucedía lo mismo con su cuerpo cerró sus ojos y dejó que el agua masajeara su cuerpo, se irguió zambulléndose y comenzó a chapalear, extasiada por el espectáculo.
Media hora después comenzó a sentir frío y se dirigió nuevamente a la playa, tenía sus brazos cruzados, tiritando levemente.
-Creí que no estaba interesada en este tipo de espectáculos -Escuchó la voz de Bashar, su cuerpo saltó instintivamente y se quedó muy quieta. Eso era lo que le había dicho temprano a ese hombre, realmente era para que no la acompañara como él había sugerido.
-No creí que le gustara espiar a las personas -Dijo sin moverse estaba en una situación poco ventajosa.
-Señorita Keller, no sabe la cantidad de cosas que me gusta hacer -La repasó detenidamente -Es una lástima que hoy sus marcas no la acompañen, su cuerpo se podría ver hermoso -Marie lo miró con sus cejas alzadas era un cumplido un tanto extraño.
-¿Aún sigue con lo mismo? -Expuso incrédula.
-No dejo de pensar en la mujer que disfrutó mientras le hacían aquellas marcas, ¿usted sabe qué es el dolor?
-Físicamente hablando -respondió Marie por inercia- la actividad comienza en los nocireceptores que detectan cualquier variación física, térmica o química capaz de producir algún daño, este envía una señal mediante la médula espinal hasta el cerebro, el órgano que decide y qué produce el dolor. -Hablo tranquila mientras que con su largo cabello seguía cubriendo sus pechos.
-No hablo solamente de la forma en cómo nuestro cuerpo produce el dolor, este se interrelaciona no solo con lo fisiológico sino que además con lo psicológico y lo cultural. Su cuerpo de forma instintiva entiende el dolor de forma diferente al resto de los mortales, pertenece a un pequeño grupo que disfruta de los beneficios de éste -Ella lo miró confundida mientras se acercaba a su ropa y se vestía, aquel episodio estaba pasando de incómodo a extraño - La línea que separa el dolor del placer es muy delgada -Marie terminó de acomodar su vestido y lo miró nuevamente - Son sensaciones primariamente físicas y bastante intensas, que activan el mismo circuito cerebral, liberando dopamina.
-Y la dopamina es un químico que se libera en nuestro cerebro y que recompensa a nuestro cuerpo dándole una sensación agradable.
-Veo que es algo aplicada. -Se acercó a ella haciendo que los finos zapatos de Bashar se hundieran más en la arena - ¿Sabe lo qué significa eso? -Ella lo miró en silencio y pensó con tal de recibir aquella recompensa el cuerpo se podría convertir adicto al dolor - cuando se habla de placer la dopamina genera relajamiento y bienestar, cuando se trata del dolor, intenta disminuir en algo ese sufrimiento, es una sensación similar a las drogas, y creo que usted comienza a sentirse atraída por el dolor.
Marie lo miró estática, como podía saber tanto de ella a partir de unas simples marcas, era verdad no dejaba de pensar en la sensación del lazo apretando su piel, de sus brazos firmes, sin poderse mover, incluso cuando Catarina, lamia el miembro de William y su sexo se humedeció de repente.
Cuando William le preguntó por una fantasía no había podido decidirse, ahora tenía claro qué quería: deseaba verlo mientras tenia sexo con otra mujer y si ella estaba atada aquello sería mucho más intenso, el látigo de la correa sobre sus muslos, su mirada desafiante, instintivamente gimió levemente, quería a William y él estaba tan lejos.
Cerró sus ojos intentando calmarse, su respiración estaba acelerada, sus manos frías y sudorosas, suspiró de forma larga y abrió sus ojos, vio los ojos grises de Bashar muy cerca de ella, sus gruesas cejas, pestañas y su boca estaba a centímetros de la suya. Marie lo miró unos instantes y él acercó sus labios a los de ella, sintió la humedad de estos y ella abrió sus ojos muy grandes retrocediendo, tropezó con sus zapatos y antes de caer a la arena él la tomó por su cintura sin dejarla de ver a los ojos.
Marie se incorporó y tomó sus zapatos alejándose de él.
-Tiene una teoría muy interesante sobre mí.
-Es usted un libro abierto y no le voy a negar que ese pensamiento sobre usted me ha tenido excitado muchas noches.
-Vaya, qué original -Se sonrió y pensó en William, le había pedido de forma abierta sexo sin promesas y palabras incomodas.
-Un cumplido de parte suya, me siento realmente halagado -Marie asintió.
-Supongo que lo está -dijo desinteresada aquello le recordaba a François y su falsa modestia.
-Es raro escuchar de usted uno, es una lástima que sea una mujer tan fiel. Quisiera hacerla gritar de dolor y placer.
-No se preocupe por eso, William lo sabe hacer a la perfección -Bashar le sonrió, pero esta vez tenía sus ojos llenos de lujuria.
-Después me dice que por qué sigo con lo mismo, no sé si es parte de su sinceridad o su falta de modestia.
Marie lo miró en silencio no quería provocar eso en él, tan solo quería dejarle claro que no estaba interesada en nadie más, a menos que llegara a un acuerdo con William. El frío golpeó su cuerpo y ella rodeó su espalda con el chal que había llevado, debía irse antes de que la alcanzara un resfriado.
-Veo que comienza a tener frio, déjeme la acompaño al auto -Marie lo miró en silencio, poco después se giró y caminó en silencio.
Debatir con aquel hombre era difícil, era ciertamente atractivo, pero en ese momento no estaba interesada en experimentar con él nada de lo que le hablaba, se despidió y entró al auto. El camino al hotel fue largo, el frío de sus bragas mojadas hacía todo más complicado, sentía arena incluso en sus glúteos. Divisó la entrada y sin ponerse los zapatos caminó a prisa por el lobby, era increíble el frío que sentía a pesar de que sabía que el clima se encontraba cálido. Al llegar a la habitación, nuevamente se dio un baño, se puso un suéter y unos leggins.
Buscó su móvil y le escribió un mensaje a William, en Londres serían las seis y quince de la tarde esperaba no molestar.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:15 pm
Ya tengo una respuesta para lo que me preguntaste hace un mes sobre cumplir una fantasía contigo.
Se sonrió al escribir el mensaje y tiró el móvil a un costado, con una expresión tonta, se sentía algo romántica, aunque fuese un tipo de romance fuera de lo común, aunque en realidad se sentía muy caliente al pensarse en esa situación con William.
Su móvil sonó y ella lo tomó, era él se sonrió y lo leyó.
William Tilman
07/05/2015
10:15 PM
¿Ah sí? ¿Qué es?
Marie E. Keller
07/05/2015
10:16 pm
Quiero que me ates, mientras te veo tener sexo con una mujer.
Contestó de inmediato, bajó su móvil sonriendo, se lo había podido decir, su móvil sonó casi que de inmediato.
William Tilman
07/05/2015
10:16 pm
Ufff Marie Elizabeth me has generado una erección.
Marie abrió su boca grande y lamió sus labios al pensar en el pene de William, llevaba días con esa sensación en su zona baja, maldición ni la vez que se tocó en la bañera era suficiente, para calmar sus ganas de su filete de W.T.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:16 pm
Esa era la idea.-Apretó los labios al escribir eso - Y así como la generé espero poder descargarla.
Miró el teléfono con su respiración acelerada, imaginando aquello, sonaba tan bajo, pero placentero qué sin darse cuenta comenzó a tocarse su sexo...
Marie E Keller
07/05/2015
10:17 pm
Si por favor... ¿Algún tipo de mujer en especial?
Marie lo meditó unos segundos, rubias definitivamente no, sabía que William decía que le gustaban o bueno sus palabras: eran que le generaban un algo extraño en él, pero para ella tenían otra connotación, así que pensó en una mujer totalmente opuesta.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:17 pm
Trigueña, voluptuosa, cabello largo ojos oscuros
El móvil volvió a sonar y ella abrió el mensaje:
William Tilman
07/05/2015
10:18 pm
Jajaja veo que te gustó mi Catarina
Marie miró el mensaje y dejó de tocarse, aish de verdad había dañado el momento.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:18 pm
Catarina ciertamente me parece guapa, pero lleva a quien quieras, eso no cambia el hecho que te quiero ver mientras fornicas con otra.
Suspiró era idiota enojarse por eso, pero aquello sonaba tan personal qué no podía evitar sentir algo de rabia, volvió a enviarle otro mensaje.
William Tilman
07/05/2015
10:18 pm
Ummm no en lugar de eso te mostraré mi catálogo y tú eliges
Suspiró de forma pesada qué más daba a quien llevara.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:18 pm
Ok, yo la elijo de tu catálogo cuando regrese. Quiero que lo hagamos pronto.
Era real, moría por hacerlo, le encantaba la idea de verlo con otra, ese día tan solo ella lo había toqueteado, pero esta vez quería verlo en acción en tercera persona, nuevamente su estómago se estrujó ante eso. William volvió a mandarle otro mensaje
William Tilman
07/05/2015
10:19 pm
Pronto.
Ella se sonrió levemente ¿y si llevaba alguien que él no conociera? ¿Aquello no sería más excitante para él?
Marie E. Keller
07/05/2015
10:19 pm
Se me ocurrió algo y ¿si llevo una mujer que no conozcas?
Esperó su respuesta emocionada su móvil vibró
William Tilman
07/05/2015
10:19 pm
Marie ese tipo de cosas no se puede hacer con cualquier tipo de persona.
Suspiró decepcionada, sentía su regaño aun a kilómetros de distancia
Marie E. Keller
07/05/2015
10:20 pm
Ok 😢 tan solo quería sorprenderte.
William Tilman
07/05/2015
10:20 pm
Ya lo hiciste con tu fantasía.
Ella estiró su boca en un puchero.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:20 PM
Sabes que me gusta superarme en el tema.
Caminó a la cama y se tiró de forma pesada, se sentía cansada y afortunadamente con sueño y no había tomado las pastillas.
William Tilman
07/05/2015
10:20 pm
Yo sigo pensando que estoy creando un monstruo.
Leyó en su pantalla y se sonrió, sí lo había creado, ese monstruo quería devorarlo completo.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:21 pm
Y yo que te tienes que hacer cargo de él.
William Tilman
07/05/2015
10:21 pm
Oh lo hago, lo hago.
Marie sonrió, de verdad lo hacía de forma satisfactoria.
Marie E. Keller
07/05/2015
10:21 pm
Porque no pienso parar en buscar formas de sorprenderte.
Bostezó, girándose a un costado, quizás él estaría en su oficina o en alguna fiesta, le extrañaba, si tan solo estuviera a pocas horas de él no dudaría en ir hasta Londres.
William Tilman
07/05/2015
10:22
Entonces seguramente yo no me cansaré de ti ;)
Marie E. Keller
07/05/2015
10:22 pm
Umm, yo no me canso de ti aunque seas un gruñón en ocasiones.
Dejó el teléfono a un costado sintiendo sus ojos pesados, dio otra vuelta más quedándose dormida… Cuando abrió sus ojos aún estaba oscuro, aunque sentía que había dormido bastante, el reloj marcaban las cuatro de la mañana, se sonrió al notar que había dormido al menos cinco horas.
No tuvo un buen despertar, no dejaba de pensar en el intercambio de mensajes con William y estuvo muy distraída, se había tropezado unas cuantas veces e incluso quemó su café al tostarlo, hasta que se llamó al orden y se sentó en su escritorio, tenía muchas cosas por revisar y no se podía permitir ser tan torpe, generalmente no lo era.
Con esto en mente apartó sus pensamientos de William y se concentró en los papeles que tenía en el escritorio, hacia un año a pesar de tener pistas claras se había dejado convencer por Beltram y lo había pasado inadvertido, esa tal empresa Water Inc., tenía muchas cosas sospechosas, al igual que sucedió con la petrolera LeBlanc la expropiación de tierras era lo que más sobresalía, aunque en apariencia se tratara de negocios legales.
Buscó artículos relacionados con expropiaciones de tierras y un nombre le llamó la atención: un artículo de Rebecca Bracho, ella hablaba de la crisis financiera en España años atrás, era algo que tan solo había leído de forma escueta sin imaginar que esto tenía que ver con aquellos hombres. Pensó en la ley de suelos que había iniciado en el año 98, tan solo había sido el abrebocas para los que años después sería un caos en España.
Inicialmente querían la privatización del mercado de suelos, la idea era aumentar el terreno urbanizable, convirtiéndolo de esta forma es un negocio muy rentable para los empresarios, multiplicando las inversiones, creando más demanda de casas y por ende al existir más oferta las personas podrían acceder de forma más sencilla a una vivienda.
Cuatro años después, efectivamente la viviendas habían aumentado y todo parecía marchar de maravillas en aquel lugar, llegaron reformas laborales que redujeron los derechos del trabajador, haciendo más atractiva la contratación a los empresarios, invirtiendo más en personal disminuyendo el desempleo, disparándose la demanda de mano de obra en cuanto a la construcción, haciendo que incluso muchos extranjeros llegaran a ese lugar.
Vio el artículo de la señorita Bracho y su pensamiento sobre los inmigrantes estaban en el país desde hacía mucho, aunque la crisis inmobiliaria y muchos otros factores comenzaron a hacer mella hasta que todo simplemente explotó. Las personas en general comenzaron a adquirir casas, incluso fue un medio efectivo para lavar dinero, como sucedía en el caso concreto de Heinz Hammer.
Dejó la taza en el escritorio y fue por su móvil a su cama, William no le había hablado más, a veces ella se ponía susceptible y quizás aquello lo irritaba, borró el historial de mensajes y volvió su vista a los papeles debía concentrarse si quería sacar algún provecho de lo que comenzaba a saber, aunque ellos no la habían contactado aún no quería que la tomarán desprevenida debía tener algún as bajo la manga.
Siguió leyendo otro documento que tenía a la mano, sobre cómo la ley de suelo fue un total fraude y la vivienda en vez de bajar sus precios comenzó a subir, pues se evaluaba en función de los beneficios potenciales, aquel margen de beneficios lo único que ocasionó fue que se aprovecharan de la situación.
Era ahí dónde entraba en escena Heinz, él manejaba unos de los bancos más importantes de Suiza, con sucursales en países como España, en aquellos documentos no solo decía que había sido el encargado de lavar muchos de sus activos por medio de la compra de terrenos, además generaron especulaciones que manipulaban la opinión pública haciendo que la vivienda aumentara su precio mucho más.
También se aprovechó de forma descarada de miles de ingenuos, que querían su casa propia, y aunque las condiciones laborales no eran las mejores, el banco les hacía préstamos con requisitos mínimos y a un tiempo exorbitante, teniendo como garante en inmueble. Si la persona llegaba a fallar en su pago, él simplemente se quedaba con la vivienda y como él precio estaba al alza, tan solo era venderla nuevamente para obtener los beneficios, ciertamente Heinz no era tan imbécil como ella lo creía.
Suspiró mirando el reloj, se hacía tarde y si quería aprovechar el día debía estar puntual, le daba rabia no tener mucha información sobre Heinz, aún su poder de observación no estaba tan agudo y si quería zafarse de todo eso tenía que conocer los puntos débiles de ellos, a veces se sentía como una niña jugando con barbies, ya que en ocasiones no tenía hechos concretos y aquello la hacía sentir frustrada.
El chofer la llevó al complejo y después de ponerse el casco de seguridad, comenzó el recorrido, Bashar comenzó hablar del diseño de interior, aunque ella había insistido qué quería qué el lugar no reflejara lujos exorbitantes, él seguía empeñado en excentricidades como una fuente con una estatua de oro, lo único que le gustaba era un jardín con plantas colgantes, aunque su idea no era del todo ecologista ya que quería era emular una de las antiguas maravillas de Babilonia, cada vez que salía con una nueva excentricidad lo único que podía hacer era debatir cada idea y eso la tenía cansada.
Llegó la hora del almuerzo y suspiró aliviada, no quería seguir escuchándolo y tendría al menos ese espacio para ella, buscó una mesa desocupada y después de pedir su comida sacó su móvil y le escribió a William, aunque sentía que era algo intensa quería hablar con él unos instantes, no sabría cuando volvería a tener tiempo, a veces sólo quería que todo aquello acabara y seguir con su vida como era hasta hacía dos años.
Comenzó a escribir, pero borró su mensaje una y otra vez, la noche anterior le había hablado y hacerlo al otro día se veía desesperado, pero qué más daba quería hablar con él y no pensaba detenerse ante eso. Escribió hola y poco después lo borró luego volvió a escribirlo simplemente era un saludo.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:00 pm
Hola :)
Escribió junto a un emoticón de una cara sonriente.
William Tilman
08/05/2015
12:00 pm
¿No trabajas?
Respondió y ella suspiró quizás si lo hacía él y tan sólo lo interrumpió.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:00 am
Estoy en receso de media hora para almorzar. ¿Te interrumpo?
William Tilman
08/05/2015
12:00 am
Ciertamente Fresa, pero si andas traviesa puedo con eso.
Miró su reloj para él eran al menos las ocho de la mañana, de verdad que sí lo andaba interrumpiendo.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:01 am
Pues, ando algo inquieta realmente así que me puedo declarar traviesa.
Había estado con muchas ganas de sexo y quería decírselo.
William Tilman
08/05/2015
12:01 am
Qué te tiene inquieta?
Le preguntó y ella suspiró y comenzó a escribir sin pensarlo mucho a pesar de sus pensamientos lujuriosos cuando sus dedos comenzaron a teclear el texto resultó totalmente opuesto.
Marie E. Keller
08/05/2015
8:01 am
El hombre que trabaja en el diseño interior se empeña en llevarme la contraria en todo, el concepto general había quedado claro en la maqueta de presentación, pero ahora tal parece ser quiere hacer un Burj Dubái.
Releyó el mensaje quería decirle algo caliente que lo estimulará no sus frustraciones de toda una mañana comenzó a borrar el mensaje pero lo que hizo fue darle send, se quedó estática y puso su frente en la mesa mientras se llamaba tonta a si misma
-Tonta, tonta, tonta -Se daba leves golpes en su frente, su móvil sonó
William Tilman
08/05/2015
12:02 am
Despidelo
Recibió de vuelta, emitió un pequeño grito, ya todo había terminado el ambiente que había entre ambos se había ido al trasto, le contestó sin decirle su frustración.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:02 am
Él incluso arruinó un contrato importante con una constructora Koreano, ahora... Ya nadie quiere tomar el proyecto.
William Tilman
08/05/2015
12:02 am
Qué esperas entonces.
Respondió William, ella estaba en conversaciones con varias constructoras, pero ninguna quería hacer negocios con ella era como si la evitaran.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:02 am
Hacer una nueva licitación para contratar una nueva firma de diseñadores, pero nadie quiere trabajar conmigo
Escribió esta vez enojada
William Tilman
08/05/2015
12:03 am
No puedes dejar que él sepa eso entonces, se aprovecharía, déjale claro que si no hace las cosas como quieres puede perder su puesto.
Le pusieron el plato en la mesa, pero ella ni lo miró.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:03 am
Me he dedicado a pelear con él toda la mañana, es claro que se quiere aprovechar de mí aun sin saber mi desventaja.
William Tilman
08/05/2015
12:04 am
Marie ¿qué te he enseñado sobre jugar?
Si hacerle creer al otro que le da algo, pero… Con Bashar Hasbún era difícil cuando él deseaba otras cosas de ella.
Marie E. Keller
08/05/2015
8:04 am
¿Hacerle creer que le doy lo que él quiere para obtener un beneficio?
William Tilman
08/05/2015
12:04 am
¿Haces eso cuando juegas ajedrez?
William Tilman
08/05/2015
12:05 am
O cuando se apuesta?
Marie E. Keller
08/05/2015
12:05 am
En el ajedrez leo la jugada de mi oponente y adelanto mi jugada.
William Tilman
08/05/2015
12:05 am
En todo juego Marie
Marie E. Keller
08/05/2015
12:05 am
William... Gracias, quería distraerte con palabras candentes y terminé hablando de ese hombre. Ahora me toca el segundo inning con él.
William Tilman
08/05/2015
12:06 am
Marie tú eres la jefa, recuerda que el miedo se huele.
Marie E. Keller
08/05/2015
12:06 am
No le tengo miedo, pero a veces me habla de cosas extrañas que me hacen sentir incómoda, en cuanto tenga la oportunidad la mejor opción es despedirlo.
William Tilman
08/05/2015
12:07 am
A veces luces como un gatico. Debo dejarte tengo una reunión
Marie E. Keller
08/05/2015
12:07 am
Que tengas un lindo día.
Guardó el móvil y se levantó su comida seguía intacta, pero hablar de ese hombre le había quitado su apetito además su media hora estaba a punto de terminar y en ese tiempo no lograría comer.
Tomó el casco y caminó con él en la mano, no pasó mucho tiempo cuando se cruzó con Bashar, caminó directamente hacia ella y cuando creyó que le diría algo, ese hombre tomó lo que tenía en la mano y se lo puso a Marie en la cabeza.
-Es peligroso que esté sin casco dentro de un lugar en construcción.
-Quería, dejar algunos puntos claros -Dijo ella seria y él le sonrió, haciéndola enojar, le molestaba que la tomaran a la ligera - Quiero que se apegue al diseño original, nada de fuentes con estatuas en oro, lámparas con detalles en diamantes o incluso pintura con fragmentos de oro.
-Creo que esos detalles son importantes y van acorde al concepto de su cadena de hoteles.
-Estaba estipulado claramente, que este proyecto no tenía que ver con la cadena de hoteles original y que se daría un ambiente familiar, cercano a la experiencia de la naturaleza, ¿De qué forma un diamante se combina con una flor? El diamante es exuberante, glamour, es algo artificial, las flores son sencillas, exóticas e inspiradoras y eso queremos, que las familias se inspiren en este lugar, creen recuerdos que puedan conservar durante mucho tiempo.
-Es irónico -dijo sin dejarla de mirar a los ojos.
-¿Qué es irónico? -Respondió enojada.
-No sé, lo qué pretende hacer en este lugar.
-Usted limítese a seguir el lineamiento y deje de analizarme, no soy ningún tipo de enferma así como lo insinuó anoche. -hizo un pobre intento por mentir y comenzó a alejarse de él.
-Señorita Keller, la entiendo -Ella se detuvo sin mirarlo y él se acercó a ella por detrás - Sé por qué le gusta el dolor. -Marie se giró y lo miró en silencio si seguía teniendo ese tipo de conversación con él, no podría obtener una posición ventajosa.
Llegó uno de los arquitectos y los invitó a seguir el recorrido, Marie dejó de mirar a Bashar, no dejaba de pensar en lo último que le había dicho, ¿por qué afirmaba que a ella le gustaba el dolor? No es como si fuese falso, era una enferma que disfrutaba que la golpearan durante el sexo, pero no recordaba decirle mucho sobre ella. Pensaba una y otra vez en su afirmación, suspiró frustrada no entendía por qué perdía su tiempo, tenía mejores cosas en qué pensar.
-Como usted ha sugerido, en la primera planta los espacios son amplios, el acabado será en tonos blancos, se pretende que estos contrasten con enredaderas de interior, creando un ambiente fresco. -Escucho a uno de los arquitectos hablar durante el recorrido.
-La fuente con una estatua en oro no será necesaria. -Miró a Bashar - El Señor Bashar, dijo que hará un nuevo boceto con los cambios -El hombre la miró negando con su cabeza, pero no la contradijo. -En cuanto a los senderos, quiero crear tres rutas -Habló saliendo de la zona de construcción dirigiéndose a uno de ellos, los hombres aceleraron el paso y la siguieron - Si, piensan en la composición familiar, cada uno de los miembros tiene necesidades diferentes, si se trata de un adulto mayor, aunque su estado físico sea óptimo, -Continuo hablando mientras tomaba uno de los senderos - no podría hacer un recorrido con una gran exigencia física, en el recorrido del día de ayer me di cuenta que no se ha tenido ese tipo de consideraciones y que incluso la señalización es pobre, no todas las personas tiene un buen sentido de orientación. Lo único en que no tengo objeciones es este mirador -Dijo mientras divisaba el atardecer, se quedó unos instante pensativa era hermoso - hacer todo este recorrido y encontrarse con esta vista es reconfortante, o al menos queremos que nuestros huéspedes lo sientan así.
Marie quedó en silencio, lo hombres comenzaron hablar entre sí, algunos añadiendo ideas otras debatiendo algunos puntos, ella les asintió, pero para ese momento su mente vagaba en otro lugar, el paisaje era hermoso, le gustaban los atardeceres ese momento justo en donde el sol comenzaba a irse o por el contrario comenzaba a emerger, dando como resultados tonos rojizos, amaba el exterior. Los hombres comenzaron a devolverse sin embargo ella no lo hizo, sabía que era algo peligroso tomar el sendero de noche, pero por algún motivo no le interesaba.
-Aun piensa en lo que le dije - Afirmó Bashar, Marie se giró y lo miró, se detuvo en sus ojos, eran color gris, ciertamente raros al único hombre que conocía con esa peculiaridad era a Matthew y aunque las facciones de ambos hombres eran realmente diferentes les daba un halo de misterio y distinción.
Ella seguía mirándolo, había pensado en su afirmación, pero en ese instante sus pensamientos estaban en otro lado, caminó hasta el borde del mirador no sabía si rendirse y preguntarle qué le hacía pensar que sabía cosas sobre ella o poner distancia.
-Es usted una persona curiosa por naturaleza, se ve algo distante con las personas por qué se involucra más de lo que debe, no quiere perder a nadie más... -Marie se giró y lo miró con rabia, ante la afirmación del hombre.
-Ya le dije que no me analice, odio que la gente pretenda saber más de los demás sin ni siquiera conocerla.
-Usted sabe que en algo de lo que digo tengo razón, Marie usted vive en muerte -Marie lo miró y entrecerró sus ojos -El dolor es uno de los estados que nos hacen sentir, sacándonos de nuestro letargo y usted quiere volver a sentir, por eso encuentra tan excitante caminar al borde de precipicios -Marie comenzó a alejarse aquel hombre era realmente cínico, le había dicho que espiar era algo que disfrutaba, pero aquello era realmente loco incluso para ella -Eso último lo supe por casualidad -Se defendió al notarla incomoda, Marie suspiró qué más daba aquel hombre le ofrecía preguntas qué no se había hecho con anterioridad.
-Sí, ya me dijo que tiene muchos extraños pasatiempos -Se sonrió cínica-¿Por qué le interesa tanto el dolor? ¿Por qué tanto interés en mí?-
Bashar se acercó a ella, la miraba con determinación y fuego.
-Me interesan los temas relacionados al placer y más cuando este tiene que ver con el dolor. En cuanto a usted, es interesante cuando una persona lo explora por primera vez, no se sabe hasta dónde va a llegar y eso es interesante. Además me recuerda a alguien.
Marie lo miró detenidamente, no sabía qué contestarle a veces era mejor guardar silencio, ella no conocía sus límites, William le decía qué creaba un monstruo, ella se giró en silencio y comenzó a devolverse, pensó en Frankestein, el ser demoniaco como era denominado en el libro, una vez vivió incluso su propio amo tuvo horror de él, ¿le pasaría lo mismo a William? ¿Una vez ella fuese irremediablemente un monstruo la desecharía? Suspiró era realmente tonto pensar en eso.
Alzó su vista y no vió a Bashar, ni a sus guardas y tampoco estaba en la ruta. Se detuvo y cruzó sus brazos era increíble que se hubiese perdido se sentó a un costado en momentos como ese era mejor estar serena y pensar sobre lo qué haría a continuación. Sacó su móvil tenía señal le marcó a William, sonó una y otra vez. Dejó el móvil de lado y miró alrededor.
-Mi Fresa, andas muy solicita, algo poco habitual en ti- Marie rió
-Oh, sí ando algo intensa -Bromeó aunque era verdad, no solía llamarle con regularidad, pero por algún motivo por esos días se sentía inquieta y con muchas ganas de oírle.
-¿Qué me vas a proponer esta vez?
-Bueno, aún tenemos algo pendiente así que sería precipitado seguir con una segunda fantasía.
-Ummm estas llamadas ya no me están gustando.
-Es realmente difícil hablarte de una fantasía cuando no te puedo degustar, eso solo haría que me comience a tocar.
-Ufff tócate.
Marie recorrió sus muslos hasta llegar a sus bragas, estaban levemente mojadas.
-¿Qué le harías a esa mujer delante mío? -Dijo con su respiración entrecortada.
-¿Qué te gustaría que le haga?
-Que le des masajes sus pechos -Suspiró al sentir su clítoris.
-Ummm ya te pusiste tímida
Marie ignoró lo que dijo y continuó.
-Que ella grite de dolor y placer al sentir tus dientes en sus pezones y tu mano se su sexo. -Pensó en que él hiciera algo similar a cuando la nalgueo y eso aumentó su libido.
-¿Dolor? ¿Por qué andas pensando en el dolor?
Marie abrió sus ojos y sacó sus dedos de su sexo
-Oh, tan solo pienso en aquella noche cuando... Me ataste -Suspiró.
-Esa noche pasó hace meses ¿por qué de repente la traes a colación? ¿Por tu fantasía?
-Sí, aquella fantasía surgió al pensar en lo que me generó ver a Catarina en tu miembro.
-Ella hace buenas mamadas ¿Quieres que la busquemos a ella?
-Sí, me parece bien, tan solo quiero que a ti te guste, eso sería lo más estimulante.
-Ahora mismo hay alguien que me gusta más. -Marie asintió, sí le gustaba más qué Catarina sería una sesión interesante.
-Oh, ¿sí? ¿De quién se trata? -Preguntó curiosa-Si te gusta tan solo llévala, quiero que te guste, los requisitos no son rígidos.
-Ya veremos.
-Señorita Keller -escuchó que la llamaban.
-Aquí estoy -dijo de vuelta y volvió al móvil -¿Por qué no estás seguro de llevarla?
-Porque se está enamorado.
-¿De ti? - Habló sorprendida y después guardó silencio, de quien más podría ser, se repitió internamente.
-No fresa del gato-rió
-Ok, lo admito, fue una pregunta tonta, pero si ella se enamora de ti y a ti te gusta más que Catarina, supongo que ustedes tienen algo. -Preguntó curiosa, finalmente él le había dicho que no le importaba qué le preguntaran por su vida privada.
-Lo tuvimos sí.
-Entonces ¿simplemente no le quieres hacer daño a ella? - Era la excusa que los hombres usaban regularmente cuando daban por terminada una relación.
Los hombres llegaron jadeando.
-Señorita... -Ella alzó su mano para que no hablaran más.
-No es ese tipo de mujer -Ella alzó sus cejas, al parecer le gustaba mucho.
-Al parecer te gusta mucho -Se levantó del césped y sacudió su vestido.
-Sí, pero me gustas más tú
Marie sonrió levemente, quizás sólo quería reafirmarle que estaba con ella o lo que él le repetía siempre: darle al otro lo que quería o hacerle creer que se le daba.
-Gracias, quisiera decirte cosas calientes, pero ya me encontraron. -Dijo al ver los hombres que la escoltaban.
-¿Te encontraron?
-Es que me había perdido por el sendero de regreso.
-Muy típico de ti
-Si, muy típico de mí. -Repitió - Aunque debo decir en defensa mía que la señalización está muy mal marcada.
-Bueno -Respondió él y comenzó a sentir gotas de lluvia y segundos después esta se intensificó, todos aceleraron el paso, pero ella se detuvo y extendió su mano, le encantaba la lluvia.
-Yo... no te interrumpo más -Cerró sus ojos un poco al sentir la lluvia picar su cara - Gracias por tu compañía a distancia, nuevamente fallé en calentarte.
-Lo dices como si tuvieras que hacerlo.
-No, no lo tomo como una obligación, me gusta y quería hacerlo.
-Otro día. -Marie reanudó el paso
-Ok, será otro día. -Dijo con una opresión en su pecho a veces ese tipo de palabras la aterraban y ¿si no había otro día? -Que estés bien.
-Cuídate.
-Vale, lo haré -Colgó el teléfono.
Unas veces se sentía fría, como la vez que él le había dicho con decepción de que ella no lo extrañaba, en aquel instante se sentía invasiva incluso le había preguntado por su intimidad, aquella mujer le gustaba en presente muchísimo y ella estaba enamorada de él, aquello sonaba realmente complicado, pero no devanaba los sesos por eso, él le había dicho que terminaría lo que había comenzado con ella y eso sucedería en el instante en que aquella mujer le gustara más que ella misma, o simplemente su tiempo finalizara, al menos tenía esa seguridad.
Había aprendido a ser libre y aquello implicaba a aprender a soltar su pasado, disfrutando su presente, ingenuamente había querido ir a sirio, pero su madre y las circunstancias se encargarían de hacerle ver la imposibilidad de obtener todo lo que quería y aun así continuar su vida.
Caminó en silencio y divisó a Bashar a lo lejos y este le asintió, ella no tenía ánimos de hablar era como si de repente toda la realidad fuese palpable en ese instante, seguía recibiendo amenazas aun cuando Jacques de forma abierta le había dicho que la aceptarían como aprendiz, todo era ridículo su situación lo era, ¿qué le había dejado su padre que ahora mismo le estaba trayendo tantos problemas? Había revisado los papeles y aparte de incriminar socios y empresarios reconocidos sentía que no era algo que ameritara todo eso.
Salió del auto y caminó por el lobby totalmente mojada, las personas la miraban mientras murmuraban, sin embargo ella pasó de largo, así era la vida en aquel lugar, estar bien puesta ser una dama, guardar las emociones, sentía como si su vida se fuese a zancadas en ese ambiente tan superficial.
Incluso ella misma en apariencia lo parecía, cada mañana iba una asesora la vestía, la peinaba y le recomendaba que Chanel usar, -era como esa mujer acostumbraba llamar la mayoría de su ropa- y como esto o aquello no combinaba con un versace, nombres y más nombres extraños, que pretenden cuantificar a las personas por lo que visten.
Se quitó la ropa mojada y se dio un baño rápido, se puso un suéter y unas bragas negras, sentía mucho frío todavía, aunque había secado su cabello, subió el termostato, aquello aliviaría en algo el frío, quería despejarse y quitar esa opresión de su pecho. Buscó un libro, no quería leer informes, quería pensar que todo eso era parte de otra realidad. Aquella biblioteca era amplia, divisó a un costado el Moderno Prometeo, se sentó a un costado y comenzó a leer.
Lo hizo por espacio de una hora y se levantó tambaleante quiso hacerse un café, pero el dolor de cabeza comenzaba a intensificarse, en momentos así odiaba más a Gerard que nunca, desde ese día la aquejaban migrañas y aunque los análisis no habían arrojado ningún problema serio eran realmente molestos. Se desvió y cerró todas las cortinas, acostándose en la cama de boca abajo, con una almohada en la cabeza.
Sintió una mano en su hombro que la movía levemente.
-Roux, esto ya no es divertido, despierta -Escuchó la voz de Crystal y ella solo movió la cabeza.
-Déjame en paz -Discutió entre dientes, Crystal la tomó del brazo y la levantó.
-Ardes en fiebre. -Habló molesta, sacó una aspirina y se la metió a la fuerza y la embutió de agua, Marie tosió levemente -Levántate. -Comenzó a quitarle el suéter dejando sus pechos al descubierto -Necesitas un baño frío, para bajar la calentura.
Marie movió su cabeza y se levantó por sí sola, fue hasta la ducha y abrió el grifo dejando caer el agua fría en su cara, después de unos segundos salió del lugar, se secó y se puso un nuevo suéter y unos jeans cortos.
-¿Qué haces aquí? -Se giró a Crystal que la miraba desde la cama.
-No es justo que solamente tú te diviertas en este paraíso -Se rió.
-Sé seria, no estoy para bromas.
-Últimamente estás más tensa que de costumbre, ¿recibiste una nueva amenaza?
Marie la miró, precisamente era lo contrario: su ignorancia. Suspiró no entender las cosas era realmente agotador, sumado a esas crecientes ganas de sexo, su cuerpo realmente la hacía quedar mal, últimamente si tenía dolor de cabeza el sólo pensar en William y comenzar a tocarse lo calmaban, incluso cuando se sentía estresada, movió su cabeza debía centrarse, no todo era sexo, pero su apetito crecía de forma descomunal.
-Vuelvo y te pregunto. ¿Qué haces aquí?
-Quise traerte noticias personalmente, los documentos en ruso que se le encontraron aquel hombre, pudimos obtener una correlación.
-Aquello no tenía coherencia para mí en primera instancia -Se cruzó de brazos -Y ¿qué encontraron?
-Recuerdas los asesinatos en tu nombre -Dijo con voz sensual.
-¡Crystal! -La regañó -Eso suena depravado incluso para ti.
-Acaso no me digas que no te excita que alguien mate y descuartice personas con un contenido altamente sexual y lo haga por ti.
-No, la verdad no, últimamente hay temas sexuales que son de mi interés, pero nada que ver con canibalismo o mutilaciones, no soy ningún tipo de psicópata. -Andaba mal de su cabeza, pero no llegaba a eso.
-Qué aburrida, el caso es que esas personas estaban relacionadas entre sí, trabajaron para un tal Cooper, en Water Corporation, la empresa que ahora mismo se encuentra en el limbo, nadie sabe de ella, su presidente murió o desapareció, no lo sé muy bien, el caso es que nadie responde ante esa compañía. Lo más interesante -Le brillaron los ojos -Es que hay un imitador.
-¿Qué quieres decir con eso?
-Estuve hablando con Thomas -Marie frunció el ceño.
-¿Le tenías que meter en esto?
-No te hagas la pendeja, sabes qué Thomas haría cualquier cosa por ti a pesar que es un maldito.
Sí claro pensó, incluso dejarla y preferir a Victoria, tanto haría por ella qué no pudo preferirla, suspiró enojada, hacía mucho no pensaba en Thomas y su elección, lo había hecho lo suficiente cuando la dejó y otro año y medio más, había estado sólo viviendo de su recuerdo y lo bien que la hizo sentir. "Eso de que haría cualquier cosa por ti" sonaba tan patético que quiso que ella se callara, pero necesitaba saber.
-No, Crystal, no sé si él haría cualquier cosa por mí, -Respondió de forma literal- puede que esté tras de algo.
-Ya dejemos el drama de lado, -Dijo Crystal englobando sus ojos - el caso es que me vi con Thomas, es una lástima que ya no quiera darse un acostón conmigo.
-Crystal, céntrate -Dijo muy lentamente.
-¿Pero eso qué te afecta a ti? Ah se me había olvidado también me acosté con William -Marie abrió sus ojos y se dio media vuelta.
-Hey es mentira -La tomó del hombro.
-Lo sé, pero no dejas de hablar tonterías y no llegas al punto.
-Ok, qué susceptible.
-No estoy susceptible, tan solo quiero escuchar los hechos no nimiedades.
-Bueno, el caso es que hablé con Thomas y él me explicó que en aquel caso existe un imitador.
-¿Entonces existe un segundo asesino?
-Sí, el primer asesinato con esas características se dio en el año de 1995, el año en el que mi adorada Roux tenia unos cinco años -Marie hizo un gesto con su mano para que continuara - Aunque no se dieron cuenta de él hasta después de un año, en aquel momento, el perfil del asesino se determinó como el de un adolescente, con marcadas tendencias caníbales, además de una fijación con los temas religiosos, dios, satán, en fin.
-¿Qué pasó, lo encontraron?
-No, no lo han encontrado, durante años, aparecieron cuerpos en las mismas condiciones, lo más icónico era que las escenas de crimen se daban en viejos moteles, de repente en el 2005, los asesinatos se detuvieron y el hombre desapareció por completo, los medios dijeron que había muerto otros que estaba gravemente enfermo, así que buscaron en hospitales, con enfermedades propias del canibalismo, pero no obtuvieron resultados. Pero estoy cansada de hablar de cosas que no entiendo, así que es mejor que Thomas te lo explique -Marie abrió los ojos.
-No te habrás atrevido a traerlo.
-No, se quedó en USA -Crystal se levantó y tomó el laptop de ella y la prendió, accediendo a Skype, Marie frunció el ceño por más seguridad que tuviera su laptop ella encontraba la forma de romper su contraseña.
Tras unos minutos de espera, el rostro de Thomas apareció en la pantalla, tenía el cabello recogido en una coleta descuidada, una camiseta gris, se giró y pudo notar una cadena de plata en su cuello, suspiró de alguna forma aunque era un extraño todo eso le parecía tan familiar.
-Deja de mirarme con rabia Marie Elizabeth -Dijo él del otro lado -Puede ser algo incómodo para ti, pero tan solo escucha.
-No te estoy mirando con odio.
-Si lo haces
-¡Qué no! -Él hizo un gesto a veces se comportaba como una cría - Tan solo di lo qué tienes qué decir.
Thomas arqueó sus cejas y estiró sus dedos entre sí, bostezando levemente, se le notaba cansado, tomó unas fotografías, sin embargo no las mostró.
-Te voy a explicar todo, quiero que seas receptiva y escuches todo de Black.
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